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Si lloras, no manejes.

Lo dijo Jaime Rivera el 25 de noviembre de 2009 , mientras ordenaba ,



Nunca tuve novia cuando era niño. Hubo varias niñas que me gustaron, pero con ninguna pasó nada. Pienso que yo subconscientemente me programaba para que no sucediera nada.

Ejemplo:
El último año de primaria me enamoré platónicamente de una niña que tenía fama de ¨puta¨ porque era bonita y había besado aparentemente a todos los niños del salón menos a mí y a otros dos o tres que yo creo que ni su madre los besaría.

Un día me preguntaron quién me gustaba y dije que ella. Resulta que yo también le gustaba. Lo supe porque una amiga suya me escuchó decirlo y se emocionó.

Al saber que era posible que anduviera con ella, me llené de pánico. ¿Cómo era posible que yo, YO, le gustara?  Por dentro yo pensé, pues claro, si a ella le gustan todos y besa a todo mundo... pero me dio miedo.

Yo no la quería besar. No sabía por qué. ¡Era una puta! Sí, era por eso. Por eso no quería besarla. Sus amigas me vieron y fueron detrás de mí corriendo para sacarme la verdad; para confirmar que de verdad me gustaba y que íbamos a ser la parejita del salón.

Cuando me alcanzaron me sentí tan amenazado que al momento que me preguntaron si ella me gustaba dije que no. Que estaba muy fea. Que había mentido. Que estaba bromeando cuando había dicho que me gustaba.

Me sentí desnudo y exhibido. Las niñas reaccionaron con desilusión y desprecio. Me dejaron ir como se tira a la basura la envoltura de un kínder sorpresa cuyo juguete ya tienes y odias.

Otro auto-sabotaje ocurrió en la secundaria. Creo que en primero de secundaria, me acerqué a la niña que me gustaba a decirle, sin más ni más, que si quería ser mi novia. Sabía que al acercármele así me iba a decir que no. Me dijo: ¨déjame pensarlo¨ y casi se me caen los pantalones.

En menos de una milésima de segundo pasó por mi mente todo lo siguiente: ¿Y si después de pensarlo dice que sí? ¿Qué diablos voy a hacer? No quiero besarla. No quiero abrazarla. Es mucho más alta que yo. Nos veríamos muy raros juntos. No tengo dinero para invitarla al cine. No sé qué hacer si un día quiere salir a algún lado. Aborten la misión. Aborten la misión. Y aborté la misión. Dije con una sonrisa estupidísima: ¨Estaba bromeando¨.

Al parecer, después procuré ¨enamorarme¨ de niñas que tenían novio o que eran más amigas que otra cosa. Lo repito. Nunca tuve novia. Yo pensaba que sí trataba de tener novia. Hoy sé que subconscientemente, yo mismo bloqueaba todas las posibilidades.

Al mismo tiempo, hubo varios niños que me gustaban. Cuando era pequeño pensaba que era envidia lo que me causaban. Pensaba que en realidad yo podía ver que ellos eran lindos y que yo quería ser como ellos. No... hoy sé que no. Hoy sé que me gustaban.

En la secundaria, había un niño que me encantaba. Su cara, su cuerpo, todo era lindo. Jugaba al futbol y era bueno. Era inteligente y sacaba muy buenas calificaciones; casi tan buenas como las mías. Mi mamá era amiga de su mamá, así que podía pasar tiempo con él cada vez que nuestras madres se visitaban. Él se quedaba a dormir en mi casa de vez en cuando y yo en la suya también con cierta frecuencia.

Yo atesoraba cada minuto que pasaba con este niño. Sabía que él había tenido muchas novias y que cambiaba de novia cada semana o cada mes. Eso me hacía admirarlo. Era todo un galán.

Una de muchas veces que me fui a quedar a dormir a su casa, mientras dormíamos (cada quién en una cama diferente) me levanté, caminé hacia su cama y lo miré fijamente por unos segundos. Él notó mi mirada, con la luz apagada, abrió los ojos y me preguntó qué pasaba. Yo le dije que si quería ser mi mejor amigo. Él, que quería seguir durmiendo, se rió y dijo que sí, que me volviera a acostar.

Su amistad era lo más preciado para mí. Era como un beneficio del que yo no me sentía merecedor. Tenía que ser una amistad muy fuerte, sí. No podía ser otra cosa. Si bien yo pensaba que él era guapo, no era que me gustara. No. Definitivamente no era eso.

No, por supuesto que no, yo no podía ser gay. Después de todo, sí me gustaban las niñas. Quizás el que este niño me gustara era algo temporal. Algo pasajero. Él era un chico popular. Yo no. Yo era de los que sacaban buenas calificaciones; ñoño. Yo era de los aburridos. Eso era: admiración. Quería estar cerca de él porque él era popular.

A veces yo mismo me sentía menos porque pensaba que si la gente se daba cuenta de que lo que sentía por él podría interpretarse como algo más que admiración o cariño de amigos, él podría dejar de querer pasar tiempo conmigo.

Yo trataba de ser lo más normal posible con este niño, pero todos mis esfuerzos me hacían ser más raro. Por ejemplo, mi primer poema a ¨la amistad¨ lo escribí pensando en lo que sentía por él. Leí el poema el lunes más cercano al 14 de febrero, en el homenaje a la bandera, enfrente de toda la escuela secundaria (con mil alumnos).

No dije que tenía una dedicatoria, pero yo le había dicho a él, días antes, que le había escrito algo. Le grabé el poema en un casete, con música de fondo. Tenía Balada para Adelina, tocada por Richard Clayderman. Al casete le puse otras canciones que yo pensaba que iban a hacer que se viera menos raro. Las canciones eran del disco ¨Missing you¨. Le di el casete después de haber leído el poema enfrente de toda la escuela, en un momento privado, aparte, pero todavía dentro de las instalaciones de la escuela. Él me invitó a pasar el fin de semana en su casa.

Yo admiro a este niño por haber tolerado tantas cosas que hice tan raras al no saber ocultar lo que sentía por él, pero intentarlo con todas mis fuerzas. Si yo hubiera sido él, habría evitado mi presencia.

Mi enamoramiento duró años. Ello me impidió mirar a nadie más. No me gustaba ningún niño, ni ninguna niña. Yo sólo tenía ojos para él y al mismo tiempo seguía aferrándome a la posibilidad de que sólo él me gustara y ningún otro hombre. Aunque sabía que no era así. Sabía que no era una etapa.

Lo veía cada vez que podía. Lo celaba, pero trataba de disimular. Lo abrazaba cada que había oportunidad de hacerlo sin que fuera raro, para poder sentir su piel. Una vez nos quedamos dormidos viendo la tele y cuando desperté, pude acariciarle el cabello, mientras él dormía. En otra ocasión similar, desperté con su brazo sobre mi pecho. No podía creer que en sus sueños él me abrazara. Fue una experiencia tan linda, que nunca la voy a olvidar. Así como eso, me encantaba cuando nos subíamos a un coche y él me decía que me sentara junto a él.

El problema era que no era correspondido del modo en el que yo hubiese querido. Si él hubiera sentido hacia mí lo mismo que yo sentía por él y hubiésemos andado, quizás habría logrado validar mis sentimientos. El hecho de enamorarme de un niño heterosexual que era tan lindo conmigo, junto con el hecho de vivir en una sociedad machista y muchos otros elementos, me dejó en el clóset por muchos años más de los que yo creo que debería haber estado.

Cuando pasé a la preparatoria, se perdió el contacto con él. En parte me dolió, pero también en parte me dio gusto. Yo ya no sabía cómo sobrellevar lo que sentía por él . Prefería tenerlo como un fantasma en mi vida. Prefería estar solo, con la idea de él, que con él, sabiendo que no podía pasar nada entre nosotros.

Cuando estando en la preparatoria, él se mudó a otra ciudad, me llamó para decirme que se iba y que quería despedirse. Yo fui con mi hermano menor. Mi mamá me había prestado el coche. Poco recuerdo de la despedida. No tuvo ningún detalle especial. Lo que recuerdo es manejar de vuelta a casa, con mi hermano en el asiento de al lado.

Apenas me subí al auto, de vuelta a casa, después de haberme despedido, comencé a llorar a mares. Fue entonces que lo supe.

No sabía explicar lo que sentía. Mi hermano no podía creer lo que veía. Yo le pedí que no dijera nada y lo cumplió. No les dijo a mis padres. Apenas podía conducir. Las lágrimas no me dejaban ver. Tuve que detenerme. Lloraba como sólo he visto llorar a las madres que pierden a sus hijos en las películas y como sólo he llorado un par de veces en mi vida.

Yo no había visto a aquel niño en meses y el que estuviera en la misma ciudad que yo o no, no hacía la menor diferencia. Sin embargo, ahora que habíamos tenido formalmente una despedida, mis sentimientos habían experimentado al fin un rompimiento. Si bien no se rompía una relación, porque no había tal, era el simbolismo de que tenía que dejarlo ir de mi vida lo que hizo que todos los sentimientos se abalanzaran.

Nunca había sentido algo tan fuerte y no volvería a sentir algo así en mucho tiempo. Era como si alguien hubiese tomado unos fórceps con muchos ganchos afilados y me estuviera jalando el corazón lentamente, desgarrándome por dentro. Se iba el gran amor de mi vida hasta ese momento y no sabía qué hacer con lo que sentía.

Tardé muchos años más en poder ordenar mis sentimientos, y saber quién era realmente. Entre las creencias religiosas que me inculcaron mis padres y la presión social por no ser ¨del otro lado¨ no vine a salir del clóset ante mis padres sino hasta que tenía 22 años. Incluso entonces ellos me pidieron que fuera discreto.

Hoy el recuerdo de ese amor platónico de adolescencia es algo que me deja una sensación muy agradable por dentro. Todavía me lleno de vergüenza cada vez que recuerdo una de las decenas de cosas que hice para comportarme ¨normal¨ y al mismo tiempo demostrarle que lo quería, y que terminaban siendo rarísimas.

No he hablado con él en años. Una de las últimas veces que hablamos, le dije que era gay. Él automáticamente dijo ¨yo no¨, como si hubiera sido necesario aclarar esa parte. En otra plática le revelé que él había sido mi motivación en muchos aspectos de mi vida para ser una mejor persona. No me atreví a decirle que estuve enamorado de él.

Por mucho tiempo pensé que él habría sido mi pareja ideal. Fantaseaba con que él un día descubriera que era gay y que me amaba. Hoy me doy cuenta que era un sueño guajiro. Claro que todo era grandioso con él. Lo que había era una linda relación de amigos. Nada más. Todo lo romántico sucedía en mi cabeza. ¿Cómo no iba a ser perfecto?

25 Comments


Una gran historia. Deliciosamente contada.
Un saludo cordial.


Winter: Muchas gracias, de verdad. Acabo de pasar por uno de tus blogs y es un verdadero cumplido que te gustara mi historia, dada la alta calidad de tus textos y la manera en la que abres tu corazón. Un honor que me hayas leído. ¡Abrazos!


Ya estoy aquí, jajaja..
Este tema me recueda a un primo mío que es gay al que quiero mucho. Cuando se supo del tema la mayoría de la família se alarmó y yo me quedé tan tranquila. Recuerdo que me dijeron: ¿te has enterado de lo de Tony? y yo dije: ¿el que? Es que es bastante grave. Ya empecé a pensar que le había pasado algo o yo que sé. Y cuando me dijeron de que iba dije: ah eso! bueno ¿y qué?
No entiendo porque la gente puede juzgar mal a los gays ni verlos como algo anormal. No tiene sentido. En fin.... no sigo que creo que ya me estoy alargando demasiado.
Una bonita história Jaime.
Muuuuuuuuuuuuacks!


vaya... sumamente complicado, eh! a mi también me paso algo similar pero al menos esa persona nunca se fue de la ciudad y estuvo ahi siempre, sólo que nunca se pudo dar...


Parece que algunos de ustedes estuvieran empeñados en hacerme llorar. Cabrones.

Mi niño:

Gracias mil por compartir esta hermosa historia. Te sorprendería si te dijera lo que todavía puede ocurrir en esa relación y las cosas que él nunca te dijo.

Por cierto, mi única novia es ahora una de mis mejores amigas. Yo le presenté a quien actualmente es su esposo ;).

Todos los arrebatados, adolescentes y pasionales besos.


Lara: No, tú no te alargaste. Ése fui yo, jejeje. Me sorprende que haya sucedido eso en España. La idea que tengo yo de tu país es que después de la muerte de Franco y con el destape, todo el "degenere" se volvió "natural" pero ya veo que todavía quedan rastros de conservadurismo. Gracias por compartir lo que pasó con tu primo.
Seguro esas pláticas suceden conmigo cuando amigos y familiares comentan todavía.

Javier: Es triste que uno se enamore de quien no puede corresponder por cualquier motivo. Como dices, al menos, en tu caso no se fue de la ciudad.

Gus: Tienes razón, quién sabe cómo veía él las cosas. Yo espero un día sentarme con este chavo del que hablé en la historia para hablar de esos tiempos y tener su punto de vista. Sería interesante saber si para él eran tan raras las cosas que yo hacía o si no les daba importancia. De lo que estoy seguro es que me tenía cariño y por eso estuvo ahí siempre, hasta que tuvo que mudarse.


Zaz con el amiguito! Bonita historia he!


Estoy de acuerdo con los comentarios anteriores, es una historia hasta cierto punto con un alto grado de romanticismo y comicidad al principio con tus intentos de autosabotaje.
No tengo mucho que decir sobre el día que lo descubrí, pues lo he sabido toda mi vida, mi heterosexualidad. Pero no puedo dejar de pensar que es lo mismo para todos. Siempre lo hemos sabido, sólo que a veces ciertas normas nos generan conflictos. Lo que me dá alegría es que ahora vivas esta parte de tu vida de una manera plena y abierta, eso debe reconfor tanto como a todos los demás que lo hacemos.


Ayyy burris!!!
Casi me hiciste llorar... :S
Que bonita historia. Y suertudote "él", nunca mencionaste su nombre.
Beso!


Q pex con el poema musicalizado? yo hubiera salido corriendo!!!

Hacemos cada cosa cuando no sabemos como expresar lo q sentimos sin ser "descubiertos", yo opte por alejarme de ellos, lo acepto, me vi cobarde, jeje

Slds.


Bonita historia que, en mi opinión, podría haberse títulado "sonrisas y lágrimas". Pues de la comicidad de tus primeras experiencias con el sexo opuesto se pasa a la soledad de las etapas posteriores.

Personalmente creo que los heterosexuales, como ya puestos a hacer confesiones también es mi caso :), no podemos hacernos una idea plena de lo que habéis pasado hasta que daís a conocer vuestra condición.

Ya que no creo que seo lo mismo saber que uno es "igual" que sentir que uno es "diferente". Queda aún mucho camino por andar.

Saludos.

P.S: El "yo no" que te respondió tu amigo me pareció fuera de lugar. Excusatio non petita accusatio manifesta^^


Ah! Por un lado qué gracioso, yo recuerdo muchos autosabotajes, aunque algunos no terminaron mal.
Pues chinga, puta sociedad con prejuicios, solo es amor.


De acuerdísimo con JChef, conozco bien ese tipo de respuestas. Más de acuerdo con el peyotito.


El 'yo no' se me hizo muy...'alejatee'

Muy gracioso, aunque creo que si alguien me hubiera salido con lo del casette si me hubiera quedado muy de WTF.


Este comentario ha sido eliminado por el autor.

JAIME ADORADO!!!!

Que historia tan bonita!!!... Como que me senti identificada en varios aspectos.

Fijate, sin darte cuenta, sabias lo que tu querias desde un principio.

Eso del autosabotaje, wow!!... me pasa, me pasa... =S siempre termino alejando a las personas que quiero de mi, aun no se como controlarlo.

De verdad que me da mucho gusto que el haya sido tu motivacion, porque (tambien a mi) me paso lo mismo!!!

Poco mas de la mitad de lo que escribo, es para mi EL. =D

APAPACHOS!!!


Bueno, ahora que por fin hemos roto el hielo y por aquello de que no hay dos sin tres,...lo del casette es 100% WTF?? No hay duda de que tu pasión por la tecnología viene de lejos. Porque claro, anda que ibas a limitarte a una carta como tod@s, no tú un "podcast" jajajaj (lo siento :)

Ahora en serio, ¿quién no hizo algo parecido? Yo escribí una carta a una compañera de clase que espero que no conserve ¬¬'


"Nada más. Todo lo romántico sucedía en mi cabeza. ¿Cómo no iba a ser perfecto? "

jaja ¿¡porqueeee, porqueee tenías que decir esooo?! jaja madres si es lo que hago todo el tiempo jajaja ay no jaja que me has hecho reir medio echar una lagrimilla, lo del autosabotaje que es algo que pensaba superadoo pero noooo jqqjq y bueno ya porque cuando pongo mucho "jaaja" es porque me emociono y es pero aún si escribo "jqqjq" porque eso demuestra lo rapido que estoy escribiendo esto :p


*Mil disculpas.- Mi comentario anterior, lo borré, porque pensé que estaba fuera de lugar (algo comun que siempre pienso de lo que escribo) asi que decidi borrarlo (algo NO muy comun que hago), por un momento pensé que no quedaria regstrado pero en fin....

Crei que estaba fuera de lugar, porque lo leí desmañanado, tu vivencia la "ví" en mi mente como una tragi-comedia, una pelicula muda, en blanco y negro, al estilo El Gordo y El Flaco, suena a que me "divertí en mala onda" de lo que te pasó, pero no es asi, ahora nos reímos de nuestras tragedias, y de las cosas "tontas" que uno hace cuando esta enomorado, sobre todo lo que hicimos siendo adolescente o pre-adolescentes, y aun ahora siendo "adultos". en resumen, me parecio linda y comica a la vez, segun dicen, la tragedia de unos es la comedia de otros.

p.s.la frase de "YO NO" de los amigos, es automatica, aunque la escuchemos muy CORTANTE, solo es una reaccion de los heterosexuales. una simple reaccion natural que no creo que haya problema por ello.
Saludos. y mil disculpas nuevamente. ;)


Yo creo que la mayoría de nosotros tenemos o hemos tenido amigos que en algún momento idealizamos.

A esa edad, una idealización bien administrada y llevada puede ser maravillosa.

Nunca te ha dado curiosidad por saber como está? Como te ve ahora con el tiempo d epor medio?

A mi si. Muchas veces.

2046


Jaimillo!!! Jajaja oiga, me encanto su relato de vida. De hecho me sentí identificado ya que me paso algo similar (muy similar).

Pero como dice mi estimado JChef WTF!!! CON LO DEL CASSETE!!! Jajaja perdón que me ria pero se me hizo algo chistoso, arriesgado, no se, lo hiciste con buena intención que es lo que cuenta.

Saludooootototes!


Tadeo: Sí, y lo malo es que fueron muchos años de estar en el clóset por esas tonterías.

Life in Paradise: Gracias! Qué bueno que te gustó.

Ro: Sí. En cierto modo es más fácil para un heterosexual porque la sociedad te indica que así debes ser. Yo iba por ese camino hasta que me di cuenta de que no era la ruta correcta para mí, y tuve que agarrar la desviación, pero ya había avanzado mucho trecho.

Yoyo: Ah, no menciono el nombre porque hasta hoy no quiero quemarlo. Si llegara a leer esto, él sabe quién es. Pero dudo que llegue a leerlo.

Gerapo Trezoo: ¿Verdad que era para correr lo del poema? De verdad que el pobre mucho aguantó. Creo que te ahorraste muchas vergüenzas.

JChef: Sí. Es una experiencia que tiene que vivirse para entenderse. Saber estas experiencias les ayuda a ustedes a entendernos. Gracias por el interés. Y sí, también he pensado que a lo mejor él estaba algo confundido también y por eso tuvo que aclarar... pero quizás nunca lo sepa. Si él sintió algo por mí, fue muy discreto y lo expresó todo como cariño de amigos siempre.

Peyote: ¿Pero por qué te autosaboteabas? Tú eres hetero. ¿A qué le temías?

Gus: Pues sólo él sabe por qué dijo lo que dijo.

Oyieth: Pues yo creo que el ¨yo no¨ fue un... ¨aunque haya parecido que te correspondía, no era así, no te creas que me gustabas¨. Y sí, yo todavía me acuerdo y siento rarito con lo del casete. ¿En qué estaba pensando?

Srta. Mueganita: ¿Y tú por qué te autosaboteabas? Lo mismo dice Peyote, pero no entiendo por qué. Es lindo tener un ¨El¨ que nos motive a hacer cosas , ¿no? Aunque es mejor cuando las hacemos conscientes también de que son buenas por nosotros mismos.

JChef: Ah, sí. Yo desde chiquitito hacía programas de radio de a mentiras. Yo tengo micrófonos en mi casa desde que tengo memoria.

Carlos: Siento muy bonito de haber podido conseguir una conexión tan linda contigo y con todos los que han dejado comentarios aquí. No esperaba esta respuesta. Como el post es algo largo, pensé que los iba a aburrir. Por fortuna no fue así.

Las Pokas Neuronas de Yobleh: Pues no me llegó el comentario anterior y no creo que me hubiera ofendido. Gracias por comentar y por aclarar después. Tendrías toda la razón en criticar porque yo mismo estoy haciendo una autocrítica. Muchos aspectos de mi vida de entonces me avergüenzan mucho y yo mismo los criticaría en alguien más.

Champy: Sí me da mucha curiosidad, pero como estoy en Florida y él está en México, no quiero tener una conversación telefónica. Él es muy parco para los emails. Entonces tiene que ser en vivo y, la verdad, no he juntado el valor para buscarlo las últimas veces que he ido a México. Yo sé que habrá oportunidad, no tengo prisa.

Ches: Ah, lo del casete es digno de una buena carcajada. Entonces te pasó algo similar... espero que te haya ido mejor.


ese "yo no" me sigue sonando raro.....


Solo porque dices que eres de Veracrúz... sino juraría que tu eres el Jaime que conocí en aquel tiempo.
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Ya lei todo el post y de plano que no fui yo aquél amiguito =D

Fue una anécdota que disfrute, no por el hecho de que sufiste un poco con el chico ese, sino porque nos revelaste una gran intimidad de ti y eso se agradece.

buenísimo relato.


tnf25: Jejeje, pues yo ya he pensado mucho sobre ese ¨yo no¨ y creo que es mejor dejarlo ahí. Se los comenté precisamente porque me sonó muy interesante.

Novak: Hombre, debes estar guapísimo, jejeje. Pero te juro que sí, crecí en Xalapa. Qué bueno que te gustó mi historia.

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